Congreso se la Deja Barata a Sánchez Magaña

Guillermo Sánchez Magaña (PRI) fue un corrupto Presidente Municipal de Tlajomulco que abusó descaradamente de la administración que tuvo a su cargo.

Durante su administración (2000-2003) la corrupción y las irregularidades administrativas abundaron. Pero como siempre sucede en Jalisco, ha sido beneficiario por más de tres años de la impunidad que cobija a los funcionarios públicos deshonestos.

Este día, 6 de marzo, el Congreso del Estado inhabilitó a Sánchez Magaña para que no pueda ocupar algún cargo público durante los próximos cuatro años. O sea nada.

Lo peor de todo es que la sanción que le impuso el Congreso nada tiene que ver con las corruptelas cometidas por Guillermo Sánchez, sino por haberse negado éste en su momento a darle el derecho de audiencia a un ciudadano.

Guillermo Sánchez Magaña seguirá impune, disfrutando de los ilegales e ilegítimos bienes que obtuvo durante su corrupta gestión. Mientras en el Congreso creen que ya hicieron su tarea.

Guillermo Martínez Mora, del PRI al PAN

Hace siete años Guillermo Martínez Mora era el aguerrido dirigente estatal de la Coparmex y mantenía una ríspida relación con el gobierno de Alberto Cárdenas Jiménez. Como parte de sus diferencias con el primer gobierno panista de Jalisco, Martínez Mora había levantado a su representante de la mesa del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública.

Entonces, por estas fechas, por voz de Raymundo Gómez Flores le llegó la invitación para convertirse en candidato del PRI a Senador por Jalisco. Y aceptó.

Gómez Flores era entonces un empresario sin participación política directa, pero su concuña Dulce María Sauri era la presidenta nacional del PRI y su amigo Francisco Labastida Ochoa era el candidato priista a la Presidencia de la República. Por eso tenía el derecho de proponer nombres para la primera fórmula de las candidaturas al Senado.

Pero Labastida puso como condición que fuera Raymundo Gómez Flores el candidato propietario, y ahí se le cayó a Martínez Mora su corta experiencia como priista.

Sin querer, Francisco Labastida le hizo una gran favor al actual Secretario de Promoción Económica del Gobierno de Emilio González.

En la elección local siguiente Martínez Mora se ligó al PAN (ya había ganando Fox la Presidencia de la República) y de ahí para estos días ha sido ya Secretario de Educación, Secretario de Administración y ahora de Promoción Económica.

Raymundo Gómez Flores, por su parte, terminó su periodo como Senador (lo fue por el principio de Primera Minoría, no de mayoría), aspiró sin éxito a ser el candidato del PRI a Gobernador y tuvo que regresar a sus negocios.

Falcón en Crónica

El cartonista Falcón, a quien vemos de lunes a viernes en Público, vuelve a partir de hoy a publicar en la Ciudad de México. Esta vez son las páginas de Crónica las que mostrarán sus cartones políticos.

Este es el cartón con el que Falcón inició su nueva etapa en ese periódico.

Hasta la semana pasada el tapatío Daniel Camacho era el cartonista de Crónica, espacio que dejó para pasarse a Reforma.

La Familia de Emilio Unida, Pero a la Nómina

En abril del 2004, cuando ejercía como Alcalde de Guadalajara, a Emilio González Márquez le estalló un escándalo al descubrirse que había contratado a tres de sus cuñados para que trabajaran en el Ayuntamiento tapatío.

Los nombres de los beneficiarios eran Eduardo Agredano, José Luis Martínez y Carlos Díaz. Además de ellos, desde antes de su llegada ya laboraba en Guadalajara su hermana Ofelia González Márquez. Los tres primeros fueron obligados a renunciar, no así la hermana ni Santiago Baeza, Director de Cultura nombrado por Emilio, quien está casado con una de sus sobrinas.

No obstante la irregularidad del nepotismo cometido, Emilio hizo berrinche hace tres años y a regañadientes aceptó que sus parientes dejaran sus cargos públicos.

Ahora como Gobernador Emilio vuelve a las andadas y ya tiene trabajando en el Siapa a su hermano Samuel, quien cobrará un sueldo de 99 mil pesos mensuales, y a su cuñada María Graciela Guzmán de León, quien con un sueldo de 22 mil pesos será la Coordinadora de la Casa Jalisco.

En el caso de la contratación de Samuel González Márquez, se ha tratado de vender la idea de que se trató de una iniciativa del titular de esa dependencia, Rodolfo Ocampo Velázquez, mismo truco que trataron de usar hace tres años, señalando que los responsables de las dependencias donde laboraban los cuñados de Emilio los habían contratado sin consultarle.

Resulta ridículo que traten de explicar así un caso tan descarado de nepotismo, como resulta inexplicable que a estas alturas Emilio González reincida en aprovecharse de su cargo para beneficiar a sus familiares con la nómina gubernamental.